Monday, October 30, 2006


"La crisis fiscal del Estado": breve comentario de la obra
Por Javier Vega Gómez
Siempre es bueno atender a las recomendaciones bibliográficas que te hacen, sobre todo si éstas vienen de la mano de personas expertas en la materia determinada sobre la que te aconsejan. En este artículo atenderé a un libro que fue recomendado por el propio profesor hará, creo, dos semanas. El libro en cuestión se titula La crisis fiscal del Estado cuya autoría le corresponde a James O’Connor. Trataré de comentar con brevedad los puntos que más interesantes me han resultado, así como las implicaciones que de tales se contraen. Señalar que la temática del libro versa sobre la crisis del Estado del capitalismo monopolista, es decir del Estado del bienestar. Temática que afronta desde la metodología marxista. Señalar, a modo de advertencia, que no entraré en valoraciones ni de la postura del autor ni del propio Estado del Bienestar, intentaré mantener la postura más aséptica posible.
Empezaré por lo que a consecuencias se refiere de la llamada crisis del Estado del Bienestar. La principal consecuencia de la de-construcción del Estado del Bienestar repercute sobre la propia legitimidad del Estado. Recordemos a este respecto que según Weber quien ejerce la dominación siente la necesidad de autojustificarse, es decir de considerar como legítima se propia actuación de dominio o ventaja, para que de esta manera los dominados acepten como válida tal dominación. Pues bien dado un desmantelamiento de las actuaciones "excesivas" del estado, el ciudadano perderá un punto de referencia para sentir legitimada la existencia del estado.
Para entender la obra aquí reseñada creo conveniente tomar en cuestión ciertos conceptos que guían la obra. A nivel de actores nos encontramos con dos sectores, el privado y el público. Dentro del sector privado tenemos las industrias competitivas organizadas por el pequeño capital y las industrias monopolistas bajo la tutela del gran capital. Dentro de los actores del sector privado se produce un conflicto entre el pequeño capital y el grande el cual se salda con la victoria, como es lógico, de éste último al cual absorbe y anulando la capacidad del pequeño productor. El sector público se caracterizaría por la intervención del estado en materia económica y social. Aunque no se encuentre reflejado en el libro podemos señalar que la intervención del estado se puede producir por tres frentes diferentes, en primer lugar mediante la prestación de servicios a través de la administración pública, en segundo lugar mediante la creación de empresas públicas y en tercer lugar mediante regulaciones. Frente a estas intervenciones la postura que toma el sector privado es ambivalente según señala O’Connor. Si bien se sitúa totalmente en contra de la creación de monopolios estatales empresariales no tanto sucede con la prestación de servicios. A lo cual añado yo, que tampoco se muestran favorables a las regulaciones, ya que éstas pueden limitar aspectos diferentes de sus "competencias" como bien puede ser la limitación de precios de sus productos. Pero en el hecho de que se muestren favorables a la prestación de servicios se encuentra el quid de la relación entre capital y estado. Relación que podríamos tildar de alianza, por ello el autor sentencia que la ayuda del Estado en general es un resultado esperable de los avances del capitalismo monopolista. A modo de resumen podemos decir que la función de la intervención del estado según O’Connor tiene como fin socializar el déficit del capitalismo así como socializar también sus costes sociales mientras que los medios de producción siguen en manos privadas. El propio autor define muy bien la esencia de esta relación al decir: "visto de esta forma el seguro social no es, básicamente, un seguro para los trabajadores, sino una especie de seguro para los capitalista y las grandes compañías" (pag 176).
Pero pasemos ya a qué se denomina en el libro "crisis fiscal del Estado", de forma concisa podemos decir que ésta consiste en un aumento mayor y más rápido del gasto gubernativo que del crecimiento de los ingresos de las arcas del Estado. Es decir estamos ante una cuestión de escasez. Algo que no se aleja de la realidad tengamos en cuenta que una de las peticiones al estado que con mayor fuerza resuenan hoy en día es la de la eficiencia. Algo que muestra muy bien la ambivalente posición que hacia la intervención del estado tenemos hoy en día ya que si por un lado no queremos que éste se retire de su extensa arena de actuación, es decir le seguimos exigiendo eficacia a la vez le pedimos eficiencia en el uso de los recursos, es decir que economice. A lo cual podemos añadir, y este añadido es mío, una secuencia en las transformaciones que el estado ha ido sufriendo a causas de las peticiones que al mismo se le han hecho. En primer lugar tendríamos la creación del estado liberal que pide contención y seguridad al mismo frente a la discrecionalidad del estado absoluto. En segundo lugar la petición de intervención dado los estragos que el capitalismo y la revolución industrial han causado en las masas obreras. Y en tercer lugar la eficiencia, dado la crisis fiscal que el estado "benefactor" ha sufrido, lo cual nos guste o no ha producido un recorte en las intervenciones del estado.
Sin más me despido, no sin antes animar a la lectura de "La crisis fiscal del Estado" dado que lo aquí comentado no es más que un muy conciso resumen de las conclusiones que he considerado más importantes.
La crisis fiscal del Estado: James O’Connor. Ediciones Península. Colección homo sociologicus. Barcelona. Traducen: Gerardo Di Masso Joseph M. Custodio y Maco Aurelio Galmarini.



Friday, October 27, 2006


Premio Nobel de la Paz: Muhammad Yunnus, los microcréditos.
Por Javier Vega Gómez

Merece mi atención, pensé en el momento en el que escuché por la radio la noticia de que el Premio Nobel de la Paz había sido concedido al “banquero” Muhammad Yunus. Hasta ese momento no había tenido noticia alguna ni de tal personaje ni de su particular medida para erradicar la pobreza: los microcréditos, por la cual le habían concedido tan prestigioso y bien dotado premio. Así que decidí adentrarme en la obra de tal personaje y fruto de tal intromisión ha surgido esta reflexión, la cual compone el comentario de noticia de esta semana.

Sin más preámbulos me adentro en el análisis de los elementos que he encontrado más interesantes. Podría detenerme en el proceso de formación y configuración del Grammer Bank, principal entidad emisora de microcréditos fundada por el mismo Yunus, y de los microcréditos pero no ha lugar para ello. Simplemente resaltar que toda la trayectoria que desemboca en la creación de una medida tan novedosa como los microcréditos responde tanto a un proceso de concienciación hacia un problema como la pobreza, la cual que vivió y vive de cerca, a la vez que es fruto de todo un proceso de reflexión.

El punto de arranque será discernir qué son los microcréditos. Pues bien los microcréditos es una forma peculiar de conceder unos créditos, peculiaridad que gira entorno a la cantidad de dinero que se concede (escasa) a la gente a la que se concede (personas, sobre todo mujeres, pobres e integradas en un grupo de cinco miembros) y al modo en que se liquida el préstamo (mediante cuotas muy pequeñas). Cada una de estas peculiaridades responden a una reflexión destinada a intentar paliar la pobreza a la vez que se centra en intentar subsanar los errores que según Yunnus cometen los bancos tradicionales.

En lo referente a la cantidad señalar que ésta podría parecer insignificante pero resulta de una gran efectividad como elemento activador de una conducta creativa y de innovación en los individuos pobres que la reciben. Los microcréditos oscilan entorno a los quince o veinte euros al mes.

La gente a la que se conceden son personas marcadas por la trágica experiencia de la pobreza. Uno de los valores centrales entorno al cual gira la idea de los microcréditos es el de la confianza en los pobres así como su marcado carácter creativo. Carácter éste que usualmente se encuentra impedido por la misma situación de pobreza que le rodea y por no tener al alcance medios para desarrollarlo. Es esta una forma de entender la creatividad de la pobreza no de una forma cínica sino comprendiendo tanto su carácter denigrante, no olvidemos que se pretende erradicar, así como su potencialidad, sin hacer de ésta, insisto, un elemento beneficioso para las sociedades tal y como creía Gilder en su obra Wealth and Poverty. Éste autor siguiendo a Gans se sitúa en la línea de los análisis de las funciones positivas de la pobreza.

Pero además de pobres los destinatarios de los microcréditos suelen ser también mujeres. Esta medida no responde a una tendencia feminista (en un sentido peyorativo) por parte de Muhammad Yunus sino que obedece a toda una explicación sociológica, a la vez que quedó demostrado que “el crédito que se concede a una mujer produce cambios más rápidamente que el que se concede a un hombre” como afirma el propio Yunnus (pag 74). Según este banquero la lista de prioridades de una mujer empieza por ella misma mientras que el hombre “se centra más en sí mismo” (pag 74). A esto se le ha de sumar que las mujeres tienen como incentivo mucho mayor que los hombres el crear un futuro prospero para sus hijos. No se nos puede olvidar que todas estas declaraciones se han de enmarcar dentro de una cultura determinada, desarrollada en un marco concreto: Bangladesh, es decir no debemos sentirnos ofendidos el sector masculino en general.

Otra peculiaridad de los destinatarios a los que se concede los microcréditos es que los deudores deben encontrarse inmersos en un grupo de apoyo. Es decir “toda persona solicitante se tiene que unir a un grupo de otras persona de ideas afines que vivieran en condiciones económicas y sociales similares a las suyas” (pag 64). Con esta medida se pretende potenciar la solidaridad entre individuos, a la vez que con ella se potencian los valores colectivos y el trabajo en grupo lo cual supone la ascensión de una mayor creatividad e iniciativa. Pero la función del grupo no es solo ésta, también se pretende dotar de seguridad al proyecto: los componentes del grupo se controlan entre ellos sobre todo si se introduce la medida de que si uno de los deudores no devuelve el dinero al resto del grupo no se le vuelve a dotar de un préstamo.

En tercer lugar supone una peculiaridad en la concesión de créditos el hecho de que estos se devuelven no de una manera brusca, es decir de una sola vez, sino todo lo contrario se estableció un mecanismo de pago que se hiciera a diario. De esta manera se evitaba que los deudores estuvieran constantemente aplazando el pago hasta llegar el punto de no pagarlo. Respecto a la obligación de devolución Yunus desarrolla la idea de que ésta es incluso beneficiosa para el deudor ya que así se ve obligado a ver que el dinero se rentabiliza es decir no se potencia el simple gasto del mismo. El propio Yunus pone por caso en su libro “El banquero de los pobres” que incluso cuando un desastre natural afecta a una zona en la cual se había concedido microcréditos la deuda no se condona, a pesar de que las consecuencias del desastre fueran deletéreas para sus inversiones, ya que así se anima a la superación de la situación. A su vez que este sistema de préstamos aún amparándose en la erradicación de la pobreza no adolece de intereses, la tasa de interés es del 20%.

Un hecho a resaltar es que a pesar de que los microcréditos se concedan a unas personas en concreto su efectos se dejan notar a nivel macroeconómico ya que favorecen al desarrollo general al ser un elemento dinamizador de la economía. Además esta medida tiene un alto valor moral ya que se yergue sobre la confianza, es decir se conceden a personas que no tiene aval ni unas condiciones favorables para pensar en su devolución, sin embargo este sistema confía en los pobres y en su capacidad de ingenio para la inversión y administración. Y esto no es un asunto baladí ya que las entidades bancarias tradicionales se basan en la desconfianza, por ello piden como requisito indispensable un aval al futuro deudor. Esto nos da cuenta del carácter innovador del Grammer Bank.

La idea de los microcréditos niega la utilidad de la concesión de limosnas. Mediante los microcréditos se pretende dinamizar y hacer de apoyo para que los pobres sean ellos mismos el agente que se proporciona un sustento sin tener que recurrir a la beneficencia. Pero esto no nos debe llevar a olvidar que el microcrédito no es una panacea, se ha de tener en cuenta que si se quiere eliminar la pobreza se ha de tomar una actuación multidimensional. Por lo que se han de crear también infraestructuras y servicios sin que estos sean una mera limosna, sino un apoyo fundamental y básico.

“El pulso de la economía española se acelera”: El crecimiento económico español, factores y consideraciones.

Por Javier Vega Gómez

En este comentario trataré de destacar los elementos que me han resultado más interesantes respecto a los condicionamientos que han permitido el proceso de bonanza económica en el que nos encontramos inmersos, el cual dura ya unos diez años. Proceso en el cual podemos destacar tanto efectos endógenos como exógenos. Así como intentaré identificar aquellos factores perniciosos que pueden disminuir la evolución positiva de la economía española. Proceso éste de bonanza al cual le hemos de reconocer la virtud de haberse desarrollado en plena crisis del petróleo.

“La estabilidad macroeconómica” es uno de los puntos destacados como condicionante de la bonanza económica por el experto consultado en el artículo que utilizo de referencia. Esto nos da cuenta de la importancia que tiene en la actualidad el sistema económico mundial como condicionante de la economía nacional, lo cual a su vez representa un proceso de complejización en la resolución de los problemas económicos mundiales tanto por parte del estado como por parte de las empresas nacionales, ya que cada vez se ha de tomar más en consideración los factores externos a las fronteras nacionales. Lo cual en última instancia supone un traslado del nivel de decisiones interior hacia el exterior y tiene como consecuencia tomar decisiones de acomodamiento a las variables exteriores.

Una variable que resulta significativa resaltar es la inmigración. En torno a esta no cabe hacer sino una interpretación positiva de su influencia en la economía nacional ya que los inmigrantes suponen un sector de población que gasta en bienes y servicios a la vez que aportan flexibilidad al mercado. A su vez se ha de señalar que los inmigrantes suponen un sector de población altamente creativo que aporta dinamismo a la economía y crecimiento. También se ha de tener en cuenta que suponen una aportación increíblemente importante de trabajo, en una sociedad como la española en la cual cada vez con más retraso se incluyen en el mercado laboral los jóvenes, a la vez que son cada vez más los ancianos al aumentarse la esperanza de vida. Todo esto repercute favorablemente tanto a nivel económico de las empresas como al sector público al aportar impuestos a las arcas del Estado. Quiero huir de toda consideración peyorativa de la inmigración a la vez que huir de toda consideración utilitarista de la misma: los inmigrantes se encuentra en todo su derecho y obligación de huir de unas condiciones perniciosas provocadas por la configuración de una economía mundo que actúan en su detrimento.

También se toma en consideración la aportación de las empresas privadas al sector económico, lo cual cae por su propio peso. Pero también se señala que para que éstas realicen inversiones es necesario la confianza la cual la aporta en parte el propio estado mediante la creación un marco estable. Con esto pretendo reivindicar la función económica del estado que si bien tiene fallos también tienes sus funciones en tanto suaviza los fallos que el mercado pueda crear, al igual que introduce los valores de equidad, lo cual redunda a su vez en la estabilidad porque ¿puede ser estable una sociedad marcada por la desigualdad? No.

En torno a la influencia de ciertos sectores como la construcción se les considera en detrimento, lo cual supone un cambio de patrón de crecimiento que se desplaza hacia el sector exterior. Esto tiene la consecuencia de crear un crecimiento más equilibrado. Podemos señalar que el crecimiento económico aportado por el sector de la construcción llega a ser desequilibrado ya que redunda de forma nociva sobre la sociedad al haber creado una subida de precios de la vivienda y recordemos que ésta es un bien de primera necesidad y un coste fijo en toda economía familiar, por lo que los altos precios de compra y alquiler de preciso repercute en una reducción del nivel de consumo por parte de las familias españolas. Aunque en el mismo artículo también se considera que el aumento de los precios de la vivienda ha tenido su parte positiva: crecimiento económico y creación de empleo.

Pero a todo esto se le han de añadir ciertos elementos perniciosos para la economía. El primer punto que podemos incluir aquí el escaso gasto que en España se hace en I+D. Lo cual supone una estrechez de mirar hacia el futuro por parte de la economía española. Ya que gran parte de la situación que ocupemos en el futuro respecto a la producción de tecnología punteras depende de la investigación y desarrollo que se realicen en el presente. Este es un papel en el cual se deberían emplear con más fuerza tanto el estado como las empresas, siendo éstas una buena correa de transmisión de las necesidades que el mercado requiere, con lo cual podemos decir que sería favorable para la economía que las empresas y el estado desarrollaran esta tarea de forma conjunta.

Y en último lugar como factor peyorativo para la economía nos encontramos con la precariedad laboral en España. La influencia peyorativa de esta situación no se ha de resumir a la economía sino también hacia el trabajador el cual sufre de una inseguridad que le dificulta en demasía su vida. Con la precariedad laboral aunque las empresas se puedan ver beneficiadas por la que en flexibilidad aporta supone una merma en la capacidad de consumo de los trabajadores sobre todo en lo que ha inversiones se refiere, pongamos por ejemplo la adquisición de coches que es uno de los sectores de venta que según el artículo más a caído en los últimos meses.













Saturday, October 21, 2006

Ausencia de escasez de demanda. Monopolio. Creatividad. Competencia

Por Javier Vega Gómez

En la clase del pasado miércoles día 17 se introdujo a debate la interesantísima relación entre consumidor y empresa. Se comentaron los efectos nocivos que tienen la ausencia de una escasez de demanda, o lo que es lo mismo que todo o casi todo producto de una empresa encuentre comprador. Esto crea como perversa consecuencia un comprador conformista que no cuestiona o no puede cuestionar la calidad del producto mediante la abstención de compra, lo cual en última instancia se traduce en una limitación del progreso ya que se hacen más lentas la mejoras y las innovaciones del producto ofrecido. La competencia es uno de los mecanismo mediante el cual se potencia la creatividad (aunque no sea una forma moralmente aceptable): cada empresa intentará introducir mejoras en su producto o bien introducir mejoras en el proceso de producción ya sea mediante un proceso de gestión más fluido y eficiente o con la aplicación de mejoras tecnológicas que potencien la producción.. A su vez la competencia provoca un miedo por parte de las empresas a la escasez de demanda, ya que ésta se puede encontrar concentrada en la empresa “enemiga”, éste es el punto es el punto en el cual radica la esencia de la competencia.

Quizás el ejemplo más claro de una ausencia de escasez de demanda sea el monopolio. Con éste se logra que sólo una empresa sea la encargada de proporcionar un producto a los consumidores. Aunque atendiendo a lo señalado anteriormente su capacidad de innovación se encuentre bastante limitada aún quedan ciertos incentivos para la innovación: lograr el aumento de su eficiencia y así disminuir sus costes y ganar más al mantener el mismo precio constante y en segundo lugar conseguir que su producto se consuma más o bien mediante la reducción del precio al disminuir también los costes a causa de una mayor eficiencia o bien al lograr que el producto en cuestión sea más atractivo y se venda más. Pero he de añadir que hay monopolios en los cuales esta segunda posibilidad no tiene sentido. Éste es el ccaso de los monopolios que se dedican a la producción de ciertos productos que por su carácter de fundamentales apenas sufren aumento o decrecimiento en su demanda, es decir esta no es flexible, éste puede ser el caso, por ejemplo, de la electricidad.

Llegados a este punto se ha de introducir otro elemento. Éste es el soporte infraestructural que ciertos impresas requieren para la distribución de sus productos. La creación de estas infraestructuras puede resultar tremendamente caro y a su vez puede verse impedido no sólo por lo oneroso de su creación sino también por otras causas como bien puede ser las geográficas. Aquí me estoy refiriendo a la creación por ejemplo de tendido eléctrico o la creación de líneas telefónicas o de vías de trenes. En estos casos las empresas que se hagan con el controlo de éstas infraestructuras serán las que tengan prácticamente el control en el respectivo sector de producción.

En último lugar quería introducir otro actor que aquí interviene: el estado. Cuál debe ser su función ¿ha de crear el soporte infraestructural para que las empresa lo utilicen, sean cuales sean y así lograr impedir los monopolios y fomentar el crecimiento económico? O por el contrario ¿ha de abstenerse el estado en la creación de tales infraestructuras ya que las empresas que las utilizan no crean sino beneficios para sí mismas siendo ellas sector privado y no público? Estas preguntas pueden resultar extremas, podemos plantearnos posiciones menos radicales: ¿puede el estado crear las infraestructuras pero a cambio cobrar su uso? Y también se puede plantear la siguiente cuestión: es función del estado crear infraestructuras saludables que potencien a la economía nacional.

En definitiva es éste un tema complejo en el cual aún no me posiciono de forma clara, me asaltan múltiples y duda, por ello dejo la cuestión abierta, para que sea el lector el que se posicione. Pero sin embargo sí que me posiciono en lo referente a lo denostable de los monopolios.

Thursday, October 19, 2006

“Píldoras para ser feliz en el trabajo”: ¿medidas para lograr felicidad o efectividad? Implicaciones morales. Condicionamientos en la emergencia de los psicofármacos.

Por Javier Vega Gómez


Partamos del sumario de hechos: en una empresa francesa, “Verizan”, se instala la primera máquina expendedora de psicofármacos destinados a erradicar la depresión y el nerviosismo de sus trabajadores. Esta descripción de los hechos tiene una ligera diferencia respecto a la realizada por el articulista de quien parto para la reflexión, Vicente Verdú, donde yo digo “psicofármacos destinados a erradicar la depresión y el nerviosismo” el periodista dice: píldoras para mejorar los rendimientos [de los trabajadores] en los horarios de trabajo”. La diferencia lejos de ser irrisoria es de un calado bastante importante, el escritor ya desde el primer momento sentencia a la empresa de hacer una manipulación de las condiciones subjetivas de los trabajadores para que estos sean mejores en su profesión, más eficaces y eficientes ¿es esta la verdadera intención de la empresa? Yo coincido con la opinión del autor, pera tal opinión necesita de argumentación, la cual no aparece desarrollada en el artículo, por ello considero pertinente hacer las siguientes preguntas: ¿se preocupa la empresa por la felicidad y la calidad de vida de sus trabajadores? o ¿la única preocupación de los empresarios es que sus operarios sean más efectivos y eficientes? Pregunta ésta que va inevitablemente unida a la siguiente, ¿resulta más rentable dopar a los trabajadores mediante psicofármacos que permitirles un tipo de vida más cómodo aunque las consecuencias sean las mismas, mayor rendimiento como consecuencia de una mayor felicidad?

Como ya he dicho comparto la opinión del autor, por ello me inclino a pensar que los empresarios tienen la única preocupación de que sus operarios sean más efectivos y eficientes y que si la felicidad es un condicionante para tal efectividad y eficiencia la manera más rentable de lograrlo es mediante psicofármacos que con horarios de trabajo más flexibles o mejores salarios, por ejemplo. Y creo esto porque me considero testigo de una sociedad en la cual se ha producido una degradación de una concepción moralmente buena de la vida a través de la imposición de una concepción económica de la vida, en la cual lo moralmente bueno es sustituido por lo rentable. El síntoma quizá más perverso de esta degradación es la utilización del individuo no como un fin íntegro, sino como un medio. Resulta pertinente, llegados a este nivel de la argumentación, plantearse si la utilización del individuo como medio es una consecuencia inevitable y cruel de la vida en sociedad. Es decir si bien la vida en sociedad surge como una forma de suplir la necesidades a las que el individuo se enfrenta, idea ésta que ha tenido una gran resonancia en toda la historia del pensamiento desde Platón hasta Freud, todo individuo tendrá “ una relación con los otros individuos considerando a estos como un medio para un fin y nunca un fin es sí mismo” por lo que este uso es inevitable ( E. Fromm. 1941, pag.34). Si dejáramos esta opinión tal y como se encuentra hasta el momento estaríamos permitiendo y dotando de impunidad un tipo de vida que olvidase totalmente el componente moral, por ello digamos que ésta es un verdad pero a medias ya que si bien hacemos un uso del individuo como medio no podemos por ello hacer un uso desmedido de él, un uso que violase su integridad. Por esto mismo el reino de los fines propuesto por Kant pude seguir siendo un fin, válgame la redundancia, al que alcanzar, el fin de considerar al individuo desde su integridad aunque a su vez sea un medio para nuestras satisfacciones. Por ello podemos decir que si en el argumento de E. Fromm hay una verdad y una trampa, en el argumento de Kant también. Y por ello también podemos decir que si es necesario el uso de los individuos como medios tampoco se puede olvidar su integridad y su configuración como fin en tanto que son en potencia individuos. Esto raya en última instancia, y volvemos así al tema aquí tratado, a que el uso de psicofármacos para mejorar la eficiencia de los trabajadores es una violación de la integridad de estos como individuos ya que merma su capacidad de autoproporcionarse felicidad a la vez que es un aditivo a la vida biológica del sujeto que enmascara una vida realmente insatisfactoria. Por lo que en realidad se está camuflando un uso cruel de un individuo que no es feliz a causa de la presión ejercida por la empresa, recordemos que lo que pretenden evitar estos psicofármacos es la depresión y el nerviosismo y que aquella puede surgir por la frustración de no cumplir unos objetivos irrealizables y el nerviosismo a causa de un continuo sentimiento de competencia, síntomas estos muy enraizados en el tipo de vida vigente y que en parte es lo que buscan las empresas: el conseguir objetivo que siempre estén por encima y ser competentes en el mercado.

Un punto que no quisiera obviar es saber si es moralmente legítimo el uso de la farmacia para autoproporcionarnos la felicidad. Éste resulta ser un tema de un cariz ciertamente arduo y quizá la resolución de la cuestión gire en dilucidar hasta qué punto el individuo es capaz de hacerse feliz a sí mismo, con su propia complexión biológica, es decir si puede darse el caso de que algunos individuos estén impedidos biológicamente para ser felices. En este caso los psicofármacos serían totalmente necesarios ya que posibilitan la felicidad y a su vez serían moralmente legítimos. Pero no ocurre lo mismo cuando en realidad no es el individuo el que biológicamente se impide la felicidad, sino que el culpable es el propio sistema, entendiendo por este todo el conjunto de relaciones en la que el individuo se ve inmerso, desde las relaciones económicas a las interindividuales. En este caso el uso de psicofármacos no es una necesidad sino un suplemento para superar una situación degradante, en este caso lo moralmente bueno sería actuar sobre un sistema que resulta opresivo y bloqueador de las potencialidades individuales que emanan de su felicidad. Es en éste último caso en el que nos encontramos con la noticia aquí señalada. Con esta puntualización logramos identificar como inmoral tanto el suministro de psicofármacos por parte de la empresa como la autosuministración de los mismos porque estos son parte de un mecanismo de autocomplacencia con el sistema, o lo que es peor son el último recurso para lograr la tan ansiada felicidad, siendo aún más sumisos. En este caso la sumisión en tanto que impide la movilización hacia el cambio es moralmente rechazable.

En último lugar quisiera saber cuál es el núcleo generatriz de una medida como la de crear psicofármacos, es decir cuál es su utilidad y por qué sintoniza con la cultura actualmente vigente. En esta profundización me remito en última instancia a lo que M. Foucault llamaba arquitectura del saber, es decir al estudio de saber cuáles son las condiciones que posibilitan la aparición de los saberes singulares de cada época, para este análisis identifico la psicofarmacia como un saber concreto. Al respecto creo que la cuestión clave radicaría en saber cuál es la utilidad de tal saber. Pues bien en mi opinión la utilidad de tal ciencia sería la reinserción de locos o, en este caso, de deprimidos en la maquinaria que constituye el sistema, mediante una técnica como la psicofarmacia que afecta directamente al componente biológico del individuo. Esto daría sentido a que tal saber aparezca en un momento en el que las enfermedades psicológicas son una triste moda provocada por un tipo de vida que exige en demasía al individuo, más de lo que puede dar y que también le exige recibir más de lo que necesita para vivir. La psicofarmacia sería por ello una forma de subsanar los problemas que el propio sistema crea. Pero no podemos ampararnos en su carácter de solución para dotarle de legitimidad, no podemos olvidar que es una solución poco moral para un problema que emana de una situación también inmoral.

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